martes, 3 de febrero de 2009

¡Qué bronca me da!


Véase si no.

Resulta que Alejandro Dolina estará esta semana en Montevideo haciendo su programa de radio desde La Sala Zitarrosa.

Las entradas son gratuitas.

Radio El Espectador, realizó en su sitio web un sorteo para repartir entre sus oyentes entradas, supongo que con el fin de ahorrarse el tener que ir hasta La Sala Zitarrosa a retirarlas personalmente.

Como mi suerte me abandonó hace años, por supuesto que no salí sorteada, aun cuando me inscribí para todos los días de la semana.

Por eso, hoy de mañana y según decían los anuncios:




Fui hasta La Sala Zitarrosa. Llegué 10. 15 ¡Cuál no sería mi sorpresa! No sólo que el local estaba completamente cerrado, con los carteles que ponen detrás de las puertas ubicados en su lugar, sino que además había un cartel que decía que las localidades para hoy estaban agotadas.


Entonces pensé:

a) que me había equivocado. ¿Sería que no era a las 10 a.m. sino a las 10 de la noche? (Aunque me dio tranquilidad ver que no fui la única equivocada).
Descarté esta posibilidad porque en ese caso las entradas no podían estar agotadas puesto que faltaban aún 12 horas para que se abriera la boletería.

b) Los funcionarios de la boletería de la Sala realmente son el colmo de la eficiencia y habían repartido todas las entradas en tan sólo 15 minutos, además de cerrar, colocar los carteles tras las puertas y salir rajando.

c) Me están jodiendo.




Volví, a conectarme inmediatamente en busca de una respuesta.

Primero fui al sitio de El Espectador. Allí seguía el anuncio, entré nuevamente y:






Este aviso es como un chiste: te invitan a ir a retirar las entradas a un lugar que a esa hora está cerrado. Es como invitar a un amigo a tu casa “venite el viernes de tarde a tomar unos mates, pero mirá que no voy a estar”, para colmos voy a un vínculo que dice “mail” Y NO HAY NINGUNA DIRECCIÓN, NI FORMA DE ESCRIBIR UN MENSAJE.

Las invitaciones están “sujetas a disponibilidad”

ENTONCES, PARA QUÉ CARAJO TE DICEN QUE VAYAS, SI YA LAS TIENEN TODAS REPARTIDAS. SI LAS VAN A DISTRIBUIR ENTRE ELLOS QUE NO LE ROMPAN LOS HUEVOS A LA GENTE HACIÉNDOLA IR AL PEDO.

Eso me llevó otra vez a la página de la Sala y confirma mis sospechas de que todo es una joda:

“(La sala) Tiene una capacidad de 547 butacas distribuidas en 407 para la platea y 140 en la tertulia”

Confirma que no es que yo haya llegado tarde sino que nunca estuvieron “disponibles” entradas para hoy.

Conclusión: QUE SE VAYAN A CAGAR DOLINA, RADIO EL ESPECTADOR, LA SALA ZITARROSA Y QUE SE METAN LAS ENTRADAS EN EL CULO, LA PUTA QUE LOS PARIÓ.

Eso sí, mañana a las 10, estoy otra vez ahí, y el jueves y el viernes. Y los reputiaré cada día como corresponde si está cerrado otra vez.





11 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo también fui hoy a buscar entradas y, como vos, no conseguí. Llegué a la sala a las 9.50, ya a esa altura la cola de gente daba casi la vuelta manzana. A las 10 empezaron a repartir las entradas y a las 10.10 las entradas ya estaban agotadas. Es posible que no tengan todas las invitaciones disponibles para repartir ahí, porque 500 personas no había, pero eran muchas, y dan dos entradas por persona. El seguridad de la sala nos dijo a los que quedamos en la puerta que hay gente que empieza a hacer la cola a las 5 am,y que después de conseguir la entrada, al no ser numeradas, van a ser cola de nuevo para conseguir buen lugar a partir de las 6, 7 de la tarde.

Tulipán dijo...

¡A la miércoles! ¿y ahora qué hago?
¿Borro la entrada? Me taparon la boca. Mejor pidos disculpas: Mis muy señores míos (Dolina, El Espectador y la Sala Zitarrosa) estoy realmente acongojada por la forma irrespetuosa en la que me dirigí a ustedes, espero sepan disculpar mis malos modales que fueron fruto de verme prohibida de disfrutar de tan honroso espectáculo brindado por ustedes. Atte. Tulipán.

Anónimo: muchas gracias por contarme ésto, ¿así que por cinco minutos me perdí la fiesta? Y bué, que le vamos a hacer. La verdad es una lástima pero mi amor por Dolina no aguanta tanto plantón, me conformaré por seguirlo por la radio o internet.
Espero que tengas mejor suerte, si es que decidís volver a intentarlo. Un beso y gracias por tu comentario.

Anónimo dijo...

Jeje, mi amor por Dolina tampoco banca tanto sacrificio y menos si no esta Gillespi!!!jaja
Mi comentario no pretendía que eliminaras la entrada, que no me parece tan errada, sacando algunos detalles. Yo imaginé que la cola iba a ser larga pero nunca eso! No puede ser que si dicen que las entradas se entregan a partir de las 10, 10.10 ya no haya más, y ahí comparto tu bronca 100%. La sala o El Espectador tendría que solucionarlo de alguna manera, y no dejar clavada a la gente que va a buscarlas, que repartan una sola por persona o que cuando se acaben las del día empiecen a repartir la del día siguiente...no sé, no vale la pena quemarse la cabeza con algo que no va a cambiar...

Tulipán dijo...

Y bué, comprémonos una cervecita, busquemos un lugar cómodo y tirémonos a escuchar la radio. Ya sabemos que al menos tres (yo vi a otro que también andaba desorientado)estamos escuchando. De paso, seguro me voy a acordar de vos. Un beso y no se pierda, vuelva, que acá siempre hay lugar.

Tulipán dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
hsm1967 dijo...

No conozco al tal Dolina, ni sé si es para tirarse de los pelos por no poder ir.....o capáz que yo no soy mejor que el.

Tulipán dijo...

A mí me gusta y me divierte, pero suelo escuchar los archivos en internet (en la barra hay un enlace) porque el programa es a horas impropias para una señorita como yo. De todas formas, ni las cejas me saco. La bronca venía por pensar que lo de las entradas era joda, pero ya se aclaró el asunto.

Por irte a ver a vos, depilación completa

hsm1967 dijo...

Tulipán: no se si creerte, pero te esperaré....como vengas jajaaja .

Tulipán dijo...

Es usted, señor Hugo, todo un caballero, espero no defraudarlo e iré lo mejor posible.

Viperina dijo...

Definitivamente, te jodieron, así de claro. El único consuelo es que seguro que no fuiste la única, aunque no te voy a decir eso de mal de muchos, consuelo de..., que tampoco quiero ofender a nadie, jejeje!!!
Respecto a tu comentario sobre tu amiga en mi entrada, comprendo lo que sientes perfectamente, pues es un caso muy parecido y que me toca muy de cerca el que me llevó a escribir ese relato. Es desgarrador ver cómo alguien a quien quieres se deja morir poco a poco, porque no son capaces de ver la realidad tal y como es, sino una versión deformada que los destruye.
Besos.

Tulipán dijo...

Gracias, Viperina, tus palabras han sido muy reconfortantes y de mucha ayuda (pondría acá una carita riendo, si se pudiera o supiera cómo hacerlo). Me refiero al primer asunto, claro, porque el otro no tiene nada de gracioso y es un asunto delicado y serio, que creo trataste con suma sensibilidad.